Sí alguien desea un resumen de la historia, en general, estará en el otro Blog: Parallel Special Recruitment.

He aquí...

En trabajo conjunto de Yukai y Suguru estamos presentando una historia fantástica con personajes reales, en un contexto irreal y con habilidades que podrían no serlo.Está basada en varias series que tratan sobre seres con distintas habilidades paranormales, nombraremos X-men, Avatar, Liga de la Justicia, entre otras.
Esperando que les agrade nuestro relato no tenemos más que decir, sólo un 'Lea y opine'.

Capitulo XIV: "Tu peux pleurer" (Parte 2)

viernes, 26 de septiembre de 2008

(Invisio y Sozore estaban inconsciente, derrotadas por Lyan. Este entró al edificio con Nividia. Louis estaba inconsciente luego de dejar bajo los escombros a Priss y Kraden. Melissa murió quemada por Incendio y él estaba ahora inconsciente en el piso).
Ariè: ¡No te distraigas!
Le dijo mientras le arrojaba un árbol a Vasti, quien se había distraído por la batalla entre Incendio y Electra, pero alcanzó a quemarlo gracias a una llamarada que creó. Ariè aprovechó eso y copió el ataque, Vasti pudo defenderse con un muro de roca que hizo surgir frente a ella. Al ver el hielo que estaba en las alas de Wen se le ocurrió un plan. Utilizó el agua control para mover el hielo y anclar a Ariè al suelo, se disponía a acabarlo con una llamarada cuando un gran destello la cegó por unos momentos y cuando abrió los ojos su rival ya no estaba. De pronto cayó al suelo, había sido herida letalmente con un trozo de hielo.
Ariè: Creo que te gané, mi querida francesa…
Vasti: Bas… tar… do…
Dijo ella y perdió el conocimiento. De pronto Ariè movió el trozo de hielo para cortarse, pero se detuvo justo a tiempo, alcanzó a reaccionar.
Ariè: ¿Así que intentas no ensuciarte las manos?
Anhellus: Yo sólo hago mi trabajo.
Ella utilizó sus ondas de sonido para arrojar a su rival contra un árbol y él al mismo tiempo la azotó con una rama usando su telequinesis. De pronto apareció Sue por medio de teletransportación e intentó atacar a Anhellus con un golpe de karate, pero fue interceptada por Tecnacis.
Nicolás: Sobre mi llegarás a ella.
Sue: No te hagas, conozco bien tus habilidades.
Nicolás: Y yo las tuyas.
Sue se teletransportó detrás de quien se interpuso en su camino, pero él volteó ágilmente para cortarla con la espada, pero ella la tiró lejos de una patada, le lanzó un golpe, pero sólo se encontró con el escudo. Entonces él utilizó la espada para crear una pistola de bolas de energía y le disparó a la mujer, quien logró esquivar el disparo muy ágilmente. El muchacho dejó el escudo y la pistola en el suelo.
Tecnacis: Creo que sería mejor cuerpo a cuerpo ¿no te parece? Nada de habilidades.
Sue: Por mí no hay problema, te ganaré de todos modos.
Ella comenzó a atacar con rápidos golpes de mano, los que su rival esquivó con gran destreza. Nicolas la botó al piso, barriéndola con una patada baja, ella se levantó sobre su mano derecha y le dio una patada en el costado a Nicolás, él aprovechó el momento para tomarle la pierna y arrojarla contra un árbol, aunque llegando a él se giró y se impulsó con las piernas para atacarlo, él se agachó y le dio un golpe en el estómago y la mujer cayó al suelo.
Sue: Veo que de algo sirvieron los entrenamientos que te di, pero el juego se acabó, ahora voy en serio.
Anhellus logró aturdir por un momento a Ariè y ahora lo tenía contra un árbol por medio de sus ondas de voz. Miraba alrededor para buscar de qué modo acabar de una vez con aquel individuo.
Ariè: ¿Qué te pasa ahora? ¿No te atreves a acabar conmigo? ¿O acaso aún sientes algo por mí?
Anhellus se acercó a él sin dejar de utilizar su habilidad para inmovilizarlo, cerró la boca por un momento y se acercó al cuello de su rival, emitió un extraño sonido.
Anhellus: Mantén la boca cerrada… aunque creo que ahora no podrás decir palabras aunque quieras.
Ella había usado su habilidad para destruir el sistema de cuerdas vocales de aquel hombre, de reojo vio que Sue hacía caer inconsciente a Tecnacis. Aprovechó el momento y proyectó un pensamiento, Sue apareció detrás de Ariè y le golpeó la cabeza para que cayera inconsciente. Luego, con sus ondas sonoras, hizo que Sue cayera también al suelo. Separó un poco a Ariè de la mujer, no tenía nada contra ella. Lo miró con desprecio, pero también con lágrimas en los ojos, abrió su boca, nada se escuchó, mas comenzó a salir sangre por los oídos y la boca de Ariè.
Ximena: Lo siento, pero creo que ya jamás podrás ni decir palabra, ni moverte, ni respirar… hasta nunca.
Corrió rápidamente a ayudar a Nigera, quien tenía dificultades con Delia. Alasse estaba inconsciente en un árbol, al parecer ya había logrado aturdirla, aunque al parecer estaba despertando. Anhellus utilizó sus ondas de sonido y la muchacha con la mujer salieron volando, a Nigera no le ocurrió nada gracias a su campo de protección.
Nigera: Gracias, me hacía falta un apoyo.
Anhellus: Para eso vine… ¡Cuidado!
Dijo y empujó a su amiga, un chorro de ácido pasó por donde ella estaba, Alasse se aprovechó de que estaba distraída. Anhellus con sus ondas de sonido retuvo a la muchacha contra un árbol y Nigera la asfixió hasta dejarla inconsciente con su humo negro, luego la arrojó lejos. Un rayo de Delia le dio a Ximena por la espalda y la hizo caer inconsciente.
Nigera: Otra vez las dos solas.
Delia: Cierra la boca y acabemos con esto.
Un rayo azulado salió contra Paula, pero impactó contra un hilo de humo negro, un árbol cercano a ella casi la impactó, pero lo detuvo con sus sombras y al mismo tiempo hizo que un árbol cercano a su rival cayera sobre ella, o al menos hizo el intento, ya que un rayo lo pulverizó. De pronto, Vasti ataca a Giselle por la espalda y ella cae al piso inconsciente y con una herida en el costado, al parecer hecha por la espada que Tecnacis había creado hace un momento. Paula cae al piso de cansancio, la necromanipulación luego de tan extenso combate la había dejado exhausta, el cadáver de Vasti cae también al suelo.

Capitulo XIV: "Tu peux pleurer" (Parte 1)

viernes, 12 de septiembre de 2008

Kraden: ¿Qué haces? ¡Acábalos! (ve que Sozore no reacciona) ¿Qué te pasa? ¿Por qué no te mueves?
Sozore: Yo… yo te conozco…
Invisio: ¿Her-… Hermana?
Kraden: ¡¿Qué?!
Se acercaron y sacaron cada uno un collar, nunca se los quitaban pues cada uno guardaba algo especial en él.
Kraden: ¡¿Qué diablos estás haciendo, Sozore?!
María: ¡Cállate!
Con su pistola arrojó lejos a Luís para que no molestara. Se enseñaron sus collares con José.
José: No lo perdiste…
María: Tú tampoco.
Ambos estaban llorando, se abrazaron fuertemente.
José: No es momento para esto (hizo que se separaran y le tomó las manos). ¿Por qué estás luchando con ellos?
María: Lo mismo podría preguntarte yo…
José: Yo escapo de la justicia… y me parece mejor luchar por la libertad de los mutantes que por una nivelación de la humanidad.
María: No sé, me parece injusto que tengamos algo que ellos no.
José: Pero si lo tenemos es por algo ¿o no?
María: No lo sé, no lo sé (cerró los ojos y abrazó a su hermano)
José: Tranquila, juntos no importa nada…
María: Tienes razón, si tenemos algo es por algo ¡vamos a luchar!
Se tomaron las manos y corrieron al campo de batalla.
Wen estaba inconciente en el piso, sus alas estaban congeladas, al parecer había sido atacada por Lyan, ya que él era quien estaba más cerca y ahora se acercaba a Anhellus, pero fue interceptado por los hermanos.
Lyan: Sozore ¿Qué haces con él?
Sozore: Lo que debí hacer desde el principio.
De pronto una pistola de bolas de energía apareció en la mano de José, al parecer las habilidades de los hermanos se combinaban y lo que María pensara José lo materializaba. Apareció ahora una espada y comenzaron a atacar a Gerald. Sozore blandió la espada y una onda de energía salió disparada hacía el muchacho, quien logró desviarla justo a tiempo contra un árbol que cayó cortado.
Lyan: Nada que tenga que ver con energías será efectivo.
José: Eso lo veremos…
Él joven rubio alzó la pistola y arrojó una bola de energía contra Lyan, pero él la devolvió cuando iba a medio camino, entonces la muchacha debió reaccionar y cortó la esfera con la espada, aprovechó la explosión para crear un escudo y se acercó corriendo hacia su oponente, quien extendió sus manos para quitarle la energía, pero el escudo fue hecho especialmente para desviar sus ataques. Entonces lo que hizo fue materializar una espada con la energía que ya tenía. Chocaron filo con filo, fue intenso hasta que de pronto una esfera de energía arrojada por Invisio le dio de pleno y lo hizo caer al piso, pero él tomó esa energía y arrojó una bola hacía el muchacho, al tiempo que ponía su espada contra la de la muchacha y al momento del contacto absorbió la energía que se utilizó en la creación de esa arma y luego la utilizó contra Sozore, quién cayó contra un árbol, y mientras estaba desprotegida le lanzó una bola de energía.
Invisio: ¡NO! ¡No dejaré que ella muera, he esperado muchos años!
Dio un disparo con su arma justo para interceptar la esfera de Lyan antes que impactara a la muchacha, entonces ella imaginó uno de sus aviones explosivos y su hermano lo arrojó contra el pelinegro, pero no se había percatado de una bola de energía que iba hacia él, se concentró para hacerse invisible y se movió de su lugar, Lyan redirigió su ataque y lo hizo chocar contra el avioncito de papel. Apuntó su mano contra la muchacha y lanzó otra bola de energía, el escudo no servía en este momento y le llegó el impacto, una bola de energía dio contra él, había sido lanzada por Invisio. Al no saber la ubicación de su enemigo recibió varios ataques. Cuando José creía que estaba ganando Gerald utilizó toda la energía que había recibido de los ataques para producir una onda que dio con el chico rubio y con la muchacha, que se había apartado. Una vez que los tenía inmovilizados les quitó a ambos la energía y se acercó a Nividia que estaba inconsciente en el piso, al parecer Anhellus la dejó así con sus ondas de sonido. Él le traspasó energía a su amiga inconsciente para que volviera en si y decidieron entrar al edificio.
Louis estaba luchando con Priss y Kraden, ella los ocultaba tras ilusiones, ya que su poder para cambiar el ánimo no era efectivo contra Rodrigo, él tenía problemas para poder atacarlos, estaba usando toda su concentración para encontrarlos y además para mover ramas de árboles cercanos a contra ellos, la gran mayoría eran cortadas por Kraden y las que casi llegaban a la muchacha eran evadidas gracias a su gran flexibilidad, decidió hacer algo más drástico y concentró todo su poder en un muro de una construcción en ruinas cerca y otro muro que estaba al lado contrario, los movió contra ambos, Kraden alcanzó a cortarlos, pero los escombros de todos modos cayeron sobre ellos. Louis cayó al piso por el cansancio que le produjo usar esta habilidad.
Melissa y Alfredo habían estado todo el momento arrojando y esquivando rayos y fuego entre ellos, nadie los quiso interrumpir, entendían que sería peor para lo ya mal que se sentían atacándose entre ellos, atacando a la persona que más querían. Chocaron sus poderes.
Melissa gritó entre sollozos: ¿Eso es todo lo que tienes?
Alfredo: No me hagas esto, no es necesario que luchemos (le contestó también llorando).
Melissa: Nunca te perdonaré por la decisión que tomaste…
Entonces ella concentró todo su poder en su ataque y el fuego de su amado retrocedió.
Alfredo: No lo hagas, no me obligues…
Melissa: Lo lamento mucho, pero es la única solución…
Alfredo: No, yo lo lamento…
Incendio se concentró enormemente, el calor en torno suyo aumentó increíblemente, los árboles cercanos cayeron quemados, comenzó a dar pasos y los rayos se redujeron considerablemente, las llamas eran ya muy poderosas. Con su último aliento gritó “¡MELISSA!” y una llamarada envolvió a la muchacha, apenas unos segundos antes que él cayera rendido al piso. Se veía el surco de las lágrimas en su rostro.

Capitulo XIII: "Des mémoires" (Parte 2)

viernes, 11 de julio de 2008

Invisio se había acercado a donde estaban peleando Sozore con Tecnacis, habían ellos avanzado por el bosque. De pronto José se queda paralizado mirando a Sozore, algo en ella le parecía familiar.
**Flash back**
Iba el pequeño niño rubio corriendo a la habitación, llevaba una hermosa flor en la mano, pensaba regalársela a su queridísima hermana. Subió rápidamente las escaleras, sin prestar atención a lo que su madre le decía. Abrió la puerta de la habitación de sopetón y se quedó paralizado en la entrada.
Niño: Hermana ¿qué haces?
En medio de la habitación había una niña dos años menor que él, tenía los mismos ojos rubios y también una piel blanca, se podía ver a simple vista que eran hermanos, se diferenciaban en que ella tenía el pelo ondulado y los ojos pardos, pero su hermano era de cabello liso y de ojos grises, además de pequeñas diferencias en la forma del rostro.
Niña: Ordeno mis maletas, mi mamá me dijo que me nos vamos mañana (lo miró con inocencia y él salió corriendo escaleras abajo).
Niño llorando: ¡¿Por qué no me avisaste?! ¡¿O ya no me quieres y me dejarás aquí?! ¡Respóndeme, mamá!
Madre: Lo lamento, pero no lo entenderás a esta edad… (Bajó la vista) Espero que tu padre te cuide bien… (Elevó el rostro y gritó) ¡María, vamos! ¡Se nos hará tarde si no te apuras!
La niña bajó con la maleta a la arrastra, era muy pequeña aún para cargarla, su madre subió a ayudarla y la metió en el automóvil. Luego volvió a entrar a la casa. Habló con el padre. La niña con su hermano y él le pasó la flor. El padre salió de la cocina para despedirse de su hija.
Padre: Tranquilo, hijo, no llores, es mejor así.
Se fueron, no las volvió a ver nunca más.
**Fin del Flash Back**
Alasse arrojó ácido contra Nigera, pero gracias al campo de sombras que ella había extendido no le pasó nada, extendió un tentáculo de su humo y golpeó a Alasse, pero justo en ese momento una roca de Telurio le pilló desprevenida por la espalda. Delia aprovechó el momento para arrojar un rayo, pero Anhellus lo desvió con su voz.
Tamcus logró evitar el impacto contra el árbol y ahora se doblaba para atacar a Telurio, debía doblarse para esquivar los impactos de las rocas. Wen había dejado a Louis cerca del lugar donde Incendio y Electra luchaban, percibió la nostalgia que ambos sentían al luchar, de pronto un rayo mal dirigido casi le da, pero lo desvió con su telequinesis y en el momento tuvo una premonición, una lágrima rodó por su mejilla, pero decidió dejar que las cosas sucedieran como debían, se fue corriendo en dirección de Vasti para ayudarle.
Por su parte, Vasti estaba usando el control de la tierra contra Ariè, pero él lograba devolverle los ataques gracias a la habilidad de mímica que poseía. Así los ataques básicos con un solo elemento no serían eficaces, Vasti decidió usar dos elementos a la vez y entonces dio una patada en el piso y un bloque de tierra salió disparado en dirección a Ariè, él los desvió con telequinesis y una llamarada creada por Vasti casi le da de pleno, pero alcanzó a esquivarla, por lo que sólo fue quemada la tela de su abrigo. Tamcus se doblaba y corría hacia dentro del edificio para huir de los ataques de Telurio, quien lo seguía de cerca y sin darle tregua. Entraron ambos al edificio.
Delia arrojaba muchos rayos contra Nigera, quien lograba defenderse con su campo de protección; en tanto, Wen tenía envuelta a Alasse dentro de un tornado para evitar que su somnífero o su gas venenoso pudieran llegar a los demás. Anhellus aprovechó el momento para usar su habilidad de proyectar pensamientos, la cual había desarrollado hace poco, así logró que Delia atacara a Alasse y la muchacha quedara aturdida un momento contra un árbol. Wen controlando el viento se encargó de que los tóxicos fueran a dar a un lugar apartado del grupo.
Rodrigo corría para ayudar a Tamcus dentro del edificio, pero se percató de ciertas presencias que se acercaban, entonces movió su mano y el edificio hacia el que corría desapareció y Priss fue arrojada contra un árbol, era una ilusión que ella había creado.
Louis: ¡Cómo no me di cuenta que estabas engañándome!
Louis debió girar rápidamente para esquivar una bola de energía que él bien conocía, era uno de los ataques de Lyan. Wen cayó al piso, sus alas de energía habían sido congeladas y no podía seguir volando, Nividia apareció también en el campo de batalla. El escudo que Tecnacis había hecho se cortó a la mitad y recibió una de las bolas de energía de la pistola de Sozore, ella se paralizó al ver a Invisio detrás de con quien luchaba. Kraden apareció detrás de Sozore, había usado su habilidad cortante para dividir el escudo de Tecnacis.
**Flash back**
Era una niña de unos 5 años, estaba en su habitación ordenando su maleta, su madre se lo había pedido. Le quedaban sólo dos prendas cuando entró su hermano de golpe, vio todos los cajones de la cómoda vacíos y la maleta llena sobre la cama.
Hermano: Hermana ¿Qué haces?
Niña: Ordeno mis maletas, mi mamá me dijo que me nos vamos mañana (lo miró con inocencia y él salió corriendo escaleras abajo).
Ella escuchó los gritos de él a su madre y luego a su madre que la llamaba, avanzó arrastrando la maleta, su madre la ayudó con ella a ponerla dentro del vehículo. Se acercó a su hermano mientras su madre iba a hablar con el papá. Él le pasó una flor.
Niño: Prométeme que nunca se te perderá.
Niña: Te lo prometo… y tu prométeme que no perderás esto (le pasó un prendedor con forma de un lápiz con alas).
Niño: Te lo prometo.
Él guardó el prendedor en su bolsillo para luego ponerlo en un sobrecito de género y ella puso su flor en un libro, algún día la tendría en algún lugar especial. Se abrazaron con lágrimas en los ojos y se marcharon.
Madre saliendo de la cocina: María, vamos… Adiós, José.
No volvió a ver a su padre ni a su hermano nunca más.
**Fin del Flash Back**
Kraden: ¿Qué haces? ¡Acábalos! (ve que Sozore no reacciona) ¿Qué te pasa? ¿Por qué no te mueves?
Sozore: Yo… yo te conozco…
Invisio: ¿Her-… Hermana?
Kraden: ¡¿Qué?!
Se acercaron y sacaron cada uno un collar, nunca se los quitaban pues cada uno guardaba algo especial en él.
Kraden: ¡¿Qué diablos estás haciendo, Sozore?!
María: ¡Cállate!
Con su pistola arrojó lejos a Luís para que no molestara. Se enseñaron sus collares con José.

Capitulo XIII: "Des mémoires" (Parte 1)

sábado, 28 de junio de 2008

[En el capítulo anterior los muchachos de la Academia se dirigieron a atacar la Nueva Base del Gobierno, pero fueron emboscados justo en el bosque anterior al recinto]
Avanzaron ordenados hacia la Base; Vasti iba delante seguida de Grace, Ximena y Alfredo; detrás de ellos iban Víctor, Débora, José y Benjamín y en última posición iban Nicolás, Rodrigo y Paula. De pronto se escuchó un ruido tras todos ellos, Paula alcanzó a poner una barrera de sombras para interceptar un rayo amarillo que Alfredo al instante reconoció bajo el control de Melissa. Por el costado derecho apareció otro rayo, esta vez de color azul atribuible a las habilidades de Giselle, ésta vez fue Alfredo quien lo contrarrestó con una llamarada.
Ximena: Parece que nos estaban esperando…
Voz 1: Estás en lo cierto, Ximena…
Grace: ¿Conoces de quién es esa voz?
Ximena: Sí, le conozco muy bien… ¿No es así, Ariè?
Ariè: Claro que lo es…
**Flash back**
De pronto una bola de energía atravesó la pantalla de sombras que hizo Paula, pero Vasti la chocó contra una llama de su creación.
Voz 2: ¿Juguemos?
Vasti: Juguemos… ¿Listos?
Víctor: Siempre…
[Comienza el capítulo...]
Se formaron en círculo todos mirando hacia fuera para poder defenderse de mejor manera, aparecieron uno a uno los que estaban bajo las órdenes del Gobierno. Luego de Ariè (a la izquierda), Melissa, Giselle y María Paz (Sozore) aparecieron: a la izquierda Ignacio (Telurio), a la derecha Francisca (Alasse) y delante Paola (Ítamis) con Alicia (Fortia). Los de la Academia se cambiaron de posición: Noiz, Catalis e Invisio hacia delante, a la parte posterior fueron Incendio y Tecnacis (Nicolás), a la izquierda Tamcus con Vasti y Louis y a la derecha Nigera, Wen y Anhellus.
Alasse extendió sus manos y un chorro de ácido salió en dirección a las tres muchachas, pero Nigera alcanzó a extender un campo de protección, Wen se elevó justo a tiempo para esquivar un rayo lanzado por Delia y Anhellus la arrojó contra un árbol con sus ondas sonoras a modo de contra-ataque. Mientras tanto Electra chocaba sus rayos contra las llamaradas de Incendio, ambos con lágrimas en los ojos por estar atacando a su amor, pero era lo que debían hacer. Por otra parte Sozore y Tecnacis peleaban espada contra espada, pero no espadas normales, sino unas que arrojaban ondas de energía a corta distancia. En frente Catalis se había transformado en un ratón para pasar detrás de Fortia, pero al convertirse en elefante para golpearla la mujer la tomó de la trompa y la arrojó lejos, entonces Noiz creó un campo de protección ceñido a su cuerpo y transformó sus manos en afiladas navajas, corrió hacia Fortia y le hizo un corte en la pierna, pero recibió un golpe que lo lanzó a cierta distancia. Ítamis estaba inquieta, pues no podía ver a Invisio, él estaba usando su habilidad para avanzar detrás de ella y poder atacarle tranquilamente; entonces ella atacó a Catalis y Invisio reaccionó utilizando su vista de rayos para herirle un poco la mano, pero Ítamis se movió ágilmente para evitar el ataque. Al costado izquierdo Telurio comenzó a arrojando una roca contra Tamcus, pero Louis la desvió con telequinesis y Tamcus aprovechó el momento para hacerse pequeño y correr donde Ariè, pero él con telequinesis también lo arrojó lejos, por suerte alcanzó a volver a su tamaño y doblarse para minimizar el impacto, Vasti entonces utilizó la tierra control para arrojar el mismo trozo de tierra contra Ariè, pero Telurio lo contrarrestó gracias a que él posee más habilidad sobre este elemento.
Un movimiento telequinético hecho por Delia arrojó a Anhellus contra un árbol y un rayo casi impacta a Louis por la espalda, pero Wen alcanzó a tomarlo y sacarlo en el momento justo.
Louis: Creo que sería mejor separar el grupo, nos tienen encerrados y eso no es bueno…
Noiz se fue corriendo dentro del edificio seguido por Catalis. Fortia e Ítamis les siguieron. Por su parte Invisio fue a ayudar a Tecnacis en su pelea contra Sozore.
Estaban chocando espada contra espada cuando un mal movimiento de Tecnacis hace que pierda el equilibrio, pero transforma su espada en un propulsor y se eleva. Sozore entonces dibuja una pistola y le arroja una bola de energía, entonces él transformó el propulsor en un escudo y alcanzó a protegerse y al caer creó una espada aparte del escudo y le lanzó una onda de energía a ella, pero ella logró interceptarlo con su espada, no la había soltado. Da otro disparo y él pone su escudo. Invisio se había acercado a donde estaban peleando, habían ellos avanzado por el bosque. De pronto José se queda paralizado mirando a Sozore, algo en ella le parecía familiar.

Capitulo XII: "En commençant la fin"

jueves, 1 de mayo de 2008

[Anteriormente: La Academia se había dividido al conocerse la verdadera intención que tenía Vasti, lléndose del lugar Danila, Luis, Gerald, Sue, Melissa y Aira.]
Sue, Aira y Gerald caminaban por la ciudad pensando en la decisión que habían tomado. Por su parte Gerald tuvo una gran decepción de sus amigos Víctor y Rodrigo, él pensaba que apoyarían una buena causa pero no fue así.
Gerald: Sue… ¿Hacia dónde nos dirigimos?
Sue: Al gobierno…
Aira: Sue, no te preocupes yo siempre estaré contigo.
Gerald: ¿Daniela y Luis, dónde están?
Sue: Fueron a la Academia a buscar una documentación.
Aira: ¿Y Melissa?
Gerald: No sé…
Sue: Creo que fue con Luis y Daniela.
Gerald: Tengo que hacer algo, este sentimiento me está consumiendo…
Aira: ¿Estás bien?
Gerald: Disculpen, en un momento las alcanzo…
Gerald es muy llevado a sus ideas, no podía aceptar que más de la mitad de la academia se hubiera quedado y por su mente pasaban las ideas más macabras que había tenido en su vida. Él estaba cansado de ser una persona pacífica que deseaba el bien y se separó de Sue y Aira, pensaba no volver.

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Vasti los citó a todos en
la Sala de conferencias, debían hablar ciertas cosas.
Vasti: Bien, ahora les explicaré que son esos aparatos de la, para ustedes, misteriosa sala del pasillo Q. Primero, en el pasillo F del tercer piso estaba la sala de investigaciones, ahí se averiguaba todo sobre las mutaciones genéticas y cualquier suceso extraño que sucediera dentro de la región, que la escogimos por la alta actividad de seres con estas variaciones que presenta. Luego la información obtenida y analizada era enviada al pasillo C, a las salas de creación de armas y de experimentos para desarrollar distintos tipos de armas para oponerse, amplificar, apoyar o incorporar habilidades. Los implementos especiales usados en sus entrenamientos y los químicos de la enfermería eran también creados en estas habitaciones. Luego, las armas más importantes y/o peligrosas eran almacenadas en la famosa sala del pasillo Q de las cuales la gran mayoría son armas biotecnológicas, pero no sé si utilizarlas o no. Por eso quiero sus opiniones y si tienen alguna pregunta quiero también escucharlas.
Ximena: No me parece, si vamos a luchar hagámoslo con lo que tenemos, nada de aparatitos extraños. Creo que sería desleal y caer bajo hacer eso.
Paula: ¡¿A quién le importa eso?! Nadie nos asegura que ellos no usarán armas de ese tipo.
Débora: Por lo que recuerdo de las batallas no vi a nadie usando ningún tipo de artilugio. Mi vista es mejor que la de ustedes y no me percaté de nada extraño en sus cuerpos.
José: Pero de todos modos, no podemos estar seguros.
Ximena: Yo estoy segura de que no lo harán, conozco el tipo de juego que sigue Ariè.
Rodrigo: Bueno, ella sabe, lo puedo asegurar…
Vasti: ¿Entonces qué hacemos?
Víctor: No las necesitamos, para eso somos secos en lo que hacemos (ríe).
Grace: Creo que lo mejor sería… quemarlas.
Paula: ¡¿Pero tú estás loca?!
Alfredo: ¡Cuánto dinero desperdiciado!
Vasti: Por eso no se preocupen, el dinero que se utilizó en
la Academia fue la herencia que me dejó mi padre… él usaba su habilidad de las premoniciones para hacer muy buenos negocios… él protegía los derechos de los mutantes… yo seguí su ejemplo.
Grace: ¡Qué hermoso!
Nicolás: Bueno, ya hemos escuchado todas las opiniones ¿no?
Benjamín: Es lo de menos, decidamos de una vez qué haremos con ellas…
Vasti: Está bien, levanten la mano los que quieren quemarlas… (Víctor, Grace, Rodrigo, Ximena, Benjamín, Nicolás y Débora alzaron sus manos). Veo que la mayoría y democráticamente lo hemos decidido, así que las armas desaparecerán.
Víctor: ¡¡Los vamos a hacer llorar y sin ninguna trampa rara!! (Todos ríen).
Vasti: Bien, creo que ahora deberíamos pasar al otro punto…

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Luego de decidir qué harían con las armas se explicó cómo se fundó
la Academia y finalmente se discutió un plan para atacar, a modo de batalla final, al gobierno.
Así, entonces, fijaron una fecha, una semana se darían para prepararse y acudirían pasado este plazo a la casa de Vasti para dirigirse a
la Nueva Base del Gobierno, tenían dispuesto distribuirse según tipo de habilidad y combatirían lo más equitativo posible. Transcurrido este tiempo partieron allá. La Nueva Base estaba ubicada en el ex-recinto militar de Tumbes.
Llegados allá se bajaron del furgón que utilizaron para transportarse.
Grace: ¿Éste es el final de todo?
Alfredo: Al parecer…
Paula: ¡Ya están haciendo drama por nada!
José: Pero tienen razón, tú y yo tenemos mucho que perder después que esto acabe…
Ximena: Qué interesante escuchar eso de tu boca…
Rodrigo: No siempre el final es cuando las cosas acaban, puede que haya algún epílogo de todo esto en nuestras vidas…
Débora: Bueno, basta de hablar ¡vamos ya a vencerlos!
Alfredo: ¿Creen que les ganemos? Siempre hemos sido derrotados, y ahora somos menos…
Víctor: Pero ahora tenemos a Vasti luchando con nosotros.
Vasti: Chicos, no se confíen, no sabemos qué ocurrirá…
Nicolás: No seas tan humilde…
Benjamín: Y quiérete un poco más.
José: Me impaciento…
Víctor y Paula: ¡Vamos de una vez!
Avanzaron ordenados hacia
la Base; Vasti iba delante seguida de Grace, Ximena y Alfredo; detrás de ellos iban Víctor, Débora, José y Benjamín y en última posición iban Nicolás, Rodrigo y Paula. De pronto se escuchó un ruido tras todos ellos, Paula alcanzó a poner una barrera de sombras para interceptar un rayo amarillo que Alfredo al instante reconoció bajo el control de Melissa. Por el costado derecho apareció otro rayo, esta vez de color azul atribuible a las habilidades de Giselle, ésta vez fue Alfredo quien lo contrarrestó con una llamarada.
Ximena: Parece que nos estaban esperando…
Voz 1: Estás en lo cierto, Ximena…
Grace: ¿Conoces de quién es esa voz?
Ximena: Sí, le conozco muy bien… ¿No es así, Ariè?
Ariè(Voz 1): Claro que lo es…

De pronto una bola de energía atravesó la pantalla de sombras que hizo Paula, pero Vasti la chocó contra una llama de su creación.
Voz 2: ¿Juguemos?

Vasti: Juguemos… ¿Listos?
Víctor: Siempre…

Capitulo XI: "Des décisions" (Parte 2)

domingo, 24 de febrero de 2008

Todos miran y ven a Sue en el piso, al parecer se habían perdido parte de la riña. Vasti la estaba apuntando con una mano.
Gerald: ¡Que alguien haga algo!
Vasti con la voz demostrando cólera: ¡QUE NADIE SE META!

El ambiente estaba muy tenso en la sala, nadie se atrevía a hacer nada, nadie excepto...
Rodrigo: ¡Déjala, ahora! ¡Lo arruinarás todo!
Con telequinesis mueve unas hojas y trata de abofetear a Vasti con ellas, pero una ráfaga de viento las desvió.
Vasti con voz pausada y llena de ira: ¡¡DIJE-QUE-NADIE-SE-META!!
Sue entonces dijo con una voz que demostraba gran dolor: Creo que es momento que sepan la verdad…
Vasti: ¡No la sabrán mientras yo esté presente! (miró amenazadoramente a Sue).
Sue: Está bien…
Ximena: ¡Momento! ¡Yo no me pienso mover si no me dicen qué diablos pasa aquí!
Vasti: Señorita Ximena, creo que no debe-…
Rodrigo la interrumpió: Yo creo lo contrario…

Vasti lo miró con odio, y le arrojó una llamarada, pero Rodrigo logró desviarla y Alfredo logró desvanecerla antes que pasara algo grave. Entonces Gerald corrió contra Vasti para calmarla, pero la telequinesis de Rodrigo lo arrojó lejos y desvió algunos poderes.
Gerald: ¡Déjame detenerla!
Rodrigo: Creo que sería mejor otro método… ¡Paula!
Ella comprendió al instante y una sombra negra envolvió a ambas mujeres, al instante Sue se calmó un poco, pero Vasti arrojaba poderes dentro del campo.
Daniela: Déjenme a mi…
Extendió sus manos y las calmó a ambas. Paula pudo deshacer las sombras y Vasti tomó la palabra.
Vasti: Lo lamento mucho, no debería haber pasado esto… Sue, explícales tú…
Sue: Bien, como les dijimos en la primera conversación que tuvimos en este lugar, hemos reclutado gente por una simple razón, proteger a nuestra ciudadanía de los planes que tiene el Gobierno y la Asociación de Experimentaciones Genéticas con los Humanos (EGEH), que está relacionada con la presidencia. Al menos eso fue lo que les dijimos, y así es. El gobierno quiere utilizar a los mutantes para mejorar a la raza humana y yo no tengo problemas ante eso. El asunto es que la Profesora aquí presente defiende el derecho de exclusividad que tenemos los mutantes en nuestros genes.
Rodrigo interrumpe: Y utiliza el control de la sangre para que no nos dijeras nada. Te tenía bajo amenaza de muerte, pues ella podía detener tu circulación, ya que al ser la sangre líquida y al tener Vasti el control sobre los líquidos le era ‘fácil’ hacerlo.
Vasti: Ahora que saben esto, están en todo el derecho de marcharse, no puedo oponerme… Pero tampoco será la última vez que me vean, se los aseguro.
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Se dio por terminada la reunión. Entonces Sue se retiró de la Academia, pero no se fue sola, se llevó a algunos de los muchachos con ella. Se fueron junto a ella los que le eran más cercanos: Gerald, Daniela, Luis, Aira y Melissa. Las actividades del lugar se habían suspendido por un tiempo. Los miembros de la Academia podían salir cuando quisieran del lugar e ir a sus casas.
Un día en la habitación B se pusieron a conversar en la noche, luego de la cena.

Grace: Entonces… ¿Somos… “los malos”?
Rodrigo: Si lo quieres tomar así… Sí, lo somos.
Ximena: A mi me parece muy subjetivo es de denominar “buenos” o “malos”, cada uno lucha por lo que cree debido ¿o no?
José: Toda la razón, pero teniendo en cuenta que somos una organización clandestina y egoísta con el resto de la gente, a diferencia del Gobierno que lo que busca es mejorar a la raza humana…
Rodrigo: En eso me opongo a ti. Si nacimos con este “don” es por algo, si todos fuéremos “especiales” la raza humana se volvería demasiado extraña y habrían muchas más posibilidades de crímenes. Muy bien sabes esto tú, José.
Ximena: Creo que no debiste decir eso último.
José: Está bien, tiene razón.
Grace: Sigo pensando lo mismo (recibe una mirada perforante de Rodrigo), pero no me iré…
Ximena: Me parece bueno…
Mientras tanto en la habitación A quedaban menos personas.
Paula: Qué bueno que se fueron, tenemos a más gente que patearle el trasero.
Víctor: No me parece tan así, pero está bien, cada uno decide lo que quiere hacer.
Débora: Es egoísta, pero no creo que los del Gobierno deban intentar “mejorar” la raza humana. Además, nadie les asegura que les van a salir bien los experimentos.
Víctor: Sí, yo no quiero andar compartiendo mis habilidades con nadie.
Paula: Ni yo… tuve que soportar muchas burlas como para que ahora todos sean iguales y yo haya tenido que sufrir en vano…
En la habitación C el ambiente era distinto, quedaba una sola persona, Alfredo que estaba recostado en su cama mirando el techo y pensando en Melissa. De pronto entran Nicolás y Benjamín.
Benjamín: Tranquilo, no es para que estés así.
Nicolás: Sí, arriba el ánimo, ya verás que haremos que se te pase todo en un rato (le sonríe).
Alfredo: Déjenme sólo, a ustedes no les cuesta tanto, no son sus novias las que se fueron…
Nicolás: No, claro que no lo son (se acerca por un lado de la cama y se sienta, Alfredo se sienta también y Nicolás le pasa un brazo por sobre los hombros). Pero nosotros te podemos distraer un rato.
Benjamín se acerca por el otro lado y hace lo mismo: Ahá, vamos a dar una vuelta y cuando vuelvas te aseguro que estarás de lo mejor (le cierra un ojo).
Alfredo: Está bien… (Con un tono que demostraba desgano). Vamos.
Entonces los tres se ponen de pie y salen tomados de los hombros.
Ya era muy tarde cuando salieron del bar donde fueron a tomar, así que Alfredo ofreció que fueran a su departamento a dormir, caminaron hasta allá y ahí pasaron la noche. Al día siguiente, cuando volvieron a la Academia, Vasti los regañó por haber salido sin avisar ni nada, pero ellos se defendieron diciendo que como tenían derecho a salir cuando quisieran no lo creyeron necesario. Vasti los contradijo y les pidió que para una próxima ocasión avisaran para evitar problemas, les dio el ejemplo de Ximena que avisó que se quedaría una noche en su departamento.
La vida en la Academia había retomado su curso, es decir, comenzaron nuevamente los entrenamientos.

Capitulo XI: "Des décisions" (Parte 1)

sábado, 23 de febrero de 2008

Sue, al igual que Vasti, dijo pocas palabras a los muchachos de la Academia, palabras poco convincentes o muy vanas.
Siguieron las actividades en la Academia, encontraron algunos mutantes en estado pacífico, pero decidieron dejarlos en sus vidas ya que, al parecer, podían controlar en todo momento su habilidad. Los entrenamientos iban bien encaminados.
Mientras los chicos estaban en una sala común la academia era cuidada por Benjamín y Nicolás, todos comentaban el suceso ocurrido en el desayuno:
José: De verdad, creo que no fue nada grave… ¿Qué creen ustedes?
Víctor: Mira, José… Creo que Vasti y Sue están sometidas a un estrés muy grande, les haría muy bien irse de compras, eso te libera de todo (les sonríe a todos).
Débora: Tú siempre con ese humor tan característico (lo dice de una manera muy dulce, repentinamente cambia su tono de voz y se escucha una voz bastante seria y firme) ¡Esto es serio, se trata de nuestras profesoras!
Rodrigo interrumpe: Mira, tú no entiendes nada de esto, yo sé y pienso qué algo va a ocurrir...
Paula: ¡Jajaja! Mira, señoriíto perfección, si te das cuenta acá no todos tenemos tu habilidad y claramente sería más fácil entendernos de ese modo. ¿Por qué siempre escondes las cosas? Obviamente sabes más cosas de las que ya sabemos nosotros… No te resulta el jueguito de no saber nada… Vamos, cuenta lo que sabes.
Rodrigo: No te entrometas, hablaré a su debido tiempo (mostraba nerviosismo en su rostro, todas las miradas se dirigían hacía el, Rodrigo comenzaba a sufrir una crisis nerviosa de la cual sólo Grace y Gerald se percataron)
Paula: Tienes miedo ¿verdad? ¡ESO ES DE COBARDES!
Rodrigo: Cállate… (Bajó la mirada y comenzó a tomarse la cabeza con sus manos)
Grace: ¡Para, Paula! ¡Le haces mal!
Rodrigo: Maldita… (Aún miraba el piso)
Paula se le acerca, lo mira de frente y le dice: ¡Dímelo a la cara si eres tan hombrecito! (la mirada de Paula se nubla y se centra sólo en los ojos de Rodrigo).
Rodrigo: ¡MALDITA! ¡Eres tan detestable a veces! ¡No te gustaría que todo el escuadrón se enterara de tu pasado!
Paula: ¡Jajaja! ¡No me haces tonta dos veces! ¡I-DIO-TA!
Las cosas de la habitación comienzan a levitar y se tiraban de un lado a otro, como ocurrió con la televisión, una mesa de centro y un sofá.
Gerald: ¡Paula, deja de jugar!
Paula contesta enfadada: ¡No soy yo!
Grace: ¡Por favor, Gerald quítale energía a Rodrigo! (Sus ojos sollozaban en lágrimas).
Rodrigo gritando: ¡QUÉ NADIE SE ME ACERQUE!
Paula: ¿El bebé se enfadó? ¡Jajaja! (Lo dijo de una manera muy sarcástica. En ese momento, mientras se reía, se le acerca Ximena tocándole la espalda y volteándola) ¿Y ahora qué te pasó a ti?
Ximena en cólera: ¡No me gustan las cosas que suceden más de una vez! Cuantas veces, Paula ¡CUANTAS VECES Sue te a enseñado a controlarte! Pero no… ¡Eres tan idiota! tan llevada a tus ideas ¡Ya no te soporto!
Paula: Lo que faltaba, resulta que ahora eres la mamá de Rodrigo…
Ximena mientras la sostenía de un hombro, con la otra mano la abofetea muy fuerte, dejándole una marca roja en su cara instantáneamente. Paula reacciona casi en fracciones de segundos empujando a Ximena, dejándola en el suelo, la toma del cuello y comienza ahorcarla. Por otro lado, Grace intentaba controlar a Rodrigo pero sus intentos eran en vano.
Ximena: Tú nunca apren-de… ras… ¡¡Auxilio, por favor!!
Paula: ¡Cállate!
Gerald se aproxima y sujeta a Paula por la espalda quitándole gran parte de su energía y ella cae tendida al piso, mientras Gerald pregunta: ¡¿Estas bien Ximena?!
Ximena: Sí, un poco adolorida (comienza a masajear su cuello). No te preocupes, gracias, ya pasará.
Rodrigo cae tendido en el piso, ya que ocupo mucha energía dejando grandes destrozos en la sala de estar. Daniela entra a la habitación y se lleva a Rodrigo a enfermería mientras Luis a Paula. Ximena los sigue.
Alfredo asombrado: ¡Gran carácter de aquella mujer!
Gerald: Y eso que no llegaste al comienzo… (Lo mira con bastante disconformidad). ¡Alfredo! Tengo que decirte algo más tarde, nos juntamos en la biblioteca.
Alfredo: ¿Solos?
Gerald: ¡Jajaja! No creas que es una cita, será una reunión de grupos. Bueno, debí ser más especifico: “Sin Melissa”.
Alfredo: Sí, ese era el problema… (Le sonríe). Pensé que iba ser algo más personal, bueno en la tarde nos juntamos. ¿Quién más va?
Gerald: Ya verás… el ambiente está denso, mejor no hablemos acá. Nos vemos mas tarde ¡Bye!
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Rodrigo y Paula no tenían lesiones, en tanto que Ximena tuvo un pequeño daño en su garganta, pero Luis la sanó de inmediato.
Se citó a todos a la sala de conferencias.
Vasti: Bien, creo que es tiempo que organicemos el ataque contra los del Gobierno, gracias a los entrenamientos han alcanzado un nivel excelente… Después de nuestro último ataque, ellos cambiaron su base de San Pedro, así que lo primero que haremos será buscar su nueva ubicación, nos separaremos en grupos y…
Sue interrumpe violentamente: ¡Ya no lo soporto! ¡Me voy de aquí!
Vasti: ¡NO! ¡Tú no te vas a ninguna parte!
Grace se asusta y Rodrigo de inmediato se pone de pie delante de ella.

Rodrigo: Creo que esto se pondrá peligroso.
Ximena: ¿Qué diablos sucede?
Paula: ¡Tan escandalosos que son! ¡Son unos niñitos todos! Es una simple discusión.
Víctor: No creo que ESO (indica con la cabeza a la doctora y la profesora) sea una ‘simple discusión’.
Todos miran y ven a Sue en el piso, al parecer se habían perdido parte de la riña. Vasti la estaba apuntando con una mano.
Gerald: ¡Que alguien haga algo!
Vasti con la voz demostrando cólera: ¡QUE NADIE SE META!

Capitulo X: "Des conversations" (Parte 2)

martes, 19 de febrero de 2008

Habitación B (todos durmiendo):
Entra Rodrigo: Justo lo que quería…
Guiándose con su telepatía se dirige a la cama de José, le tapa la boca y lo despierta. José lo mira y Rodrigo le hace un gesto para que guarde silencio. Él obedece. Hablan en voz baja, sentados en la cama.
Rodrigo: Te preocupa algo ¿no?
José: Exacto, lo leíste ¿cierto?
Rodrigo: ¿Qué crees?... Espera (le hace una seña para que se calle)… estábamos despertando a Ximena, vi cómo se movía, a ella no le puedo leer la mente...
José: Te estás desviando del tema….
Rodrigo: Disculpa, pero respóndeme.
José: Sé que lo sabes…
Rodrigo: Pero si no me quieres contar no lo leeré todo, sólo sentí que algo te pasaba… me llamabas (lo mira al pequeño brillo que reflejaban sus ojos)… creo.
José: Mmm… Sí, es que pasó algo curioso con Sue, pero no creo que sea el momento para decírtelo…
Rodrigo: Está bien…
José: Si quieres saberlo, léelo, no tengo problemas…
Rodrigo: De acuerdo.
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Sue: ¿Hasta cuándo seguiremos con esto?

Vasti: Hasta que tengamos suficiente fuerza.
Sue: Sinceramente no entiendo porqué quieres hacer todo eso…
Vasti extiende una mano hacia Sue: No tienes nada que entender, sólo obedecer.
Sue cambió su cara de desafío a miedo y asintió con la cabeza, bajó la mirada y se fue.
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A la mañana siguiente, al momento del desayuno estaban conversando animosamente, separados por grupos: En una mesa estaban Gerald, Aira, Víctor y Débora, en otra estaban José, Rodrigo, Ximena y Grace, en la tercera mesa se encontraban Melissa y Alfredo y en una cuarta mesa estaba Paula. Sue y Vasti ocupaban una quinta mesa con algunos funcionarios de la Academia.
Mesa 1:
Víctor: Oye ¿por qué te saliste ayer de la pieza? (Dirigiéndose a Gerald).
Aira: ¡Ya empezaste a preguntar! ¡Deja de meterte en la vida de la gente! ¡Metiche!
Víctor: ¡Cállate flacuchenta! Si él quiere responder que lo haga, si no quiere no. No lo estoy obligado.
Gerald: Lo que pasa es que me sentí mal y para no resfriarlos a ustedes me fui, pero Luis me dijo que no era nada (le dirigió una mirada cómplice a Débora).
Víctor le dirigió una mirada soberbia a Aira: ¡Viste que no era nada!
Aira: ¡Cómo digas! ¿Tú estás bien? (Miró a Débora). Estás tan callada…
Débora: Sí, el tratamiento terminó anoche, gracias (sonríe), sólo me duele un poco la cabeza.
Aira: ¡Me alegro!
Víctor la miró con cierto enfado en los ojos.
Mesa 2:
Ximena: Cuando llegaste anoche me despertaste, Rodrigo.
Rodrigo: ¡Lo lamento! No era mi intención, pero ¿lograste conciliar sueño pronto?
Ximena: Por suerte, parece que estaba demasiado cansada, sólo sentí la puerta, nada más.
Rodrigo: Menos mal (mira a José significativamente, reacciona al notar que Grace se percata de las miradas). José ¿me pasas la leche?
José: Claro, ten (le pasa una de las cajas de leche que estaban en la mesa).
Rodrigo: Gracias (se rellena el tazón). Y tú, Grace ¿cómo dormiste?
Grace: ¡Bien, me siento de lo mejor para lo que sea!
Ximena: ¡Jajaja, excelente!
Mesa 3:
Melissa: No dormí bien anoche, estaba preocupada…
Alfredo: ¿Preocupada de qué?
Melissa: De lo que dijo la Señorita Daniela, eso que pensaba en uno de los muchachos…
Alfredo: Pero dijo que no era algo importante, relájate (le besa la mejilla).
Melissa: Bueno, bueno… pero también me preocupa ella (indica a Paula con un gesto casi imperceptible)… siempre se sienta sola…
Alfredo: Déjala, es su manera de ser… mientras no nos ataque está todo bien ¿no? (Ríe, pero se detiene al ver la mirada de su novia). Okay, Okay, lo siento…
Melissa: Le preguntaré si quiere venir a sentarse con nosotros…
Alfredo: ¿Para qué? ¿No estamos mejor solos?

Melissa lo ignora: ¡Ey! ¡Paula! (la muchacha de la otra mesa le mira) ¿Quieres venir a sentarte con nosotros?
Paula hace un gesto con la cabeza y se cambia de mesa: Buenos días…
Melissa: ¡Hola! (Le sonríe) ¿Por qué siempre tan sola?
Paula: No me llama la atención la gente…
Alfredo con cierto disgusto: Te dije que era su manera de ser…
Melissa: Ya, cállate… (Ahora a Paula), creo que deberías ser más sociable, no te haría mal…
Paula: Como digas…
En la quinta mesa, al parecer estaban discutiendo Vasti y Sue, hace unos días se estaba haciendo costumbre… Sue se levantó de la mesa y se fue. Todos quedaron sorprendidos.
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Algunos se acercaron a Sue para saber lo que pasaba, pocos escucharon ambas versiones y algunos tanto ignoraron el asunto, ya se estaban acostumbrando a las discusiones; “en algún momento debían ocurrir”, pensaban los apáticos.

Capitulo X: "Des conversations" (Parte 1)

lunes, 18 de febrero de 2008

Volvieron los de la Academia después de la batalla que libraron en la base del Gobierno. Luego de un balance que pareció bastante positivo comieron algo y se dirigieron a sus habitaciones, era ya algo tarde y estaban cansados…
Habitación A (Gerald, Víctor, Paula y Aira):

Paula: ¡Estoy muy cansada! Nuca había usado tanta energía en un solo día…
Víctor: Parece que yo me herí las manos, esa mujer de verdad es muy fuerte, me costó demasiado hacerle cortes…
Aira: ¿Por qué no vas a enfermería?
Víctor tratando de convencer: No es para tanto, un simple dolor por haber hecho fuerza ¡mañana estaré mucho mejor! (Mira a Gerald) ¿Y a ti que te pasa?
Aira: ¡Déjalo! Si está así es por algo…
Víctor entonces se le acercó: ¿Estás bien?
Gerald: ¡No me toques! Creo que sería mejor que pase la noche en una habitación aparte, iré a hablar con Luis (se levanta y sale de la habitación).
Paula: ¡Wiii! ¡Tenemos la habitación para los tres solos!
Aira con tono despreciativo: ¿No estabas tan cansada?
Paula: Tienes razón, mejor me duermo (baja la mirada y se dirige a su cama).
Víctor: Emmm… espera, quiero que conversemos, nunca hablamos…
Paula: No creo que sea bueno ni entretenido hablar de mi vida…
Aira: ¡Súper autista! ¡Jajaja! Dale, hablemos.
Víctor: ¡Déjate de molestar!
Paula: ¿Y qué quieres saber de mi?
Víctor: No sé, lo que quieras contarnos… (Piensa) ¡Ya sé! ¡Cuéntanos los del asesinato!
Aira: ¡Oye, desubicado, cómo se te ocurre preguntar eso!
Paula: Déjalo, es algo que superé… (Baja la mirada, suspira y alza el rostro nuevamente). A ver ¿Qué quieres saber del asesinato?
Víctor con ansias y curiosidad en los ojos: ¡TODO! (reacciona) Perdón, lo que me quieras contar…. ¿Dónde fue? ¿Cómo? ¿Por qué? Cosas así…
Paula: Ocurrió en mi departamento, lo asesiné con mi humo negro, se descontroló porque estaba enfadada y lo hice porque estaba cansada de todo…
Aira: Por cómo lo dices pareciera que no quieres hablar del tema…
Víctor: Pero está hablando y eso es lo que me importa (tose). ¿Todo qué? Cuéntame…
Paula: Todo, mi “no-familia”, mi soledad, las burlas, que haya jugado conmigo… todo (su tono e3 voz se notaba algo tembloroso).
Aira se dirigió a Víctor: Oye, para o te congelo… fue un día agotador hoy, mejor durmamos.
Paula: Creo que sería mejor.
Víctor: ¡Flacucha metiche!
Aira: ¡Amargado copuchento!
Paula: ¡Ya, ya, duerman! (apaga la luz).

Habitación B (Grace, José, Ximena y Rodrigo):

Ximena: ¡Estoy exhausta!
Grace: Me lo imagino, yo que estaba en la segunda línea estoy cansada.
José: ¿De verdad fue tan fuerte?
Ximena: Demasiado, estaban todos ahí… De no haber sido por Ariè habríamos obtenido alguna ganancia (su voz demostraba enfado).
Grace tratando de desviar la atención: Creo que sería mejor dormir…
Rodrigo: Está bien, la apago cuando salga, iré a buscar una pastilla a la enfermería, me duele la cabeza… (Se levanta y al salir apaga la luz).

Habitación C (Daniela, Melissa y Alfredo):

Melissa. Señorita Figueroa, es raro verla tan temprano aquí.
Daniela: Decidí venir antes para descansar por la batalla de hoy (sonríe).
Alfredo: De verdad estuvo fuerte esto. No pensé que saldría esa niña, ni menos que me tocara luchar contra ella…
Melissa: Al menos, ninguno de nosotros resultó muy herido…
Alfredo: Amor, no sabemos bien cómo se encuentran los demás…
Daniela: Están bien… al menos cuando dejé la enfermería estaban bien… (Mostró algo de preocupación).
Melissa: ¿Pasa algo?
Daniela: Nada, estaba pensando en uno de los muchachos… en fin ¿a dormir?
Alfredo: ¡A dormir!
Daniela: ¡Buenas noches! Y cuidadito con los cambios de camas ¿OK?
Melissa: ¡Jajaja! Cómo diga… Iré a apagar la luz.
Alfredo: No, déjame a mi (le sonríe, se levanta a apagar la luz y vuelve a su cama alumbrado por una pequeña llama, sin antes pasar a darle un beso a Melissa).
Daniela: ¡Puro amor!
Ríen y se acomodan en sus camas.

Enfermería (Luis, Débora):

Luis: Bien, creo que mañana ya estarás bien. Por tus características animales es más fácil hacerte la terapia curativa, asimilas más rápido los daños.
Débora: Gracias, buenas noches.
Luis: Bue-…
Se vio interrumpido por Gerald que entró a la enfermería.
Gerald: Disculpe…
Luis: ¿Qué sucede? ¿Te estás sintiendo mal?
Gerald: Tengo miedo de contagiar al resto…
Débora: ¿Contagiar? ¿Estás resfriado?
Luis se dirigió a Débora: No te preocupes, lo tengo controlado, descansa. (A Gerald) Vamos a hablar afuera (salen). No sé si manes residuos del veneno, pero está bien, te daré una habitación aparte de las de aquí…
Se disponían a caminar al cuarto cuando aparece Rodrigo.
Rodrigo: Primero llévelo, después le pido lo que quiero.
Luis: Está bien (Se van y vuelve luego Luis solo). Dime ¿qué pasa? Mira que leer las mentes yo no puedo ¡jeje!
Rodrigo: Me duele un poco la cabeza…
Luis: No sabré leer mentes, pero sé cuando alguien miente…
Rodrigo: Si no me cree las busco yo, no creo que me cueste encontrarlas.
Luis: Está bien… (Se va a un estante y le pasa dos pastillas). Con eso creo que se te pasará el dolor de aquí a mañana, tómatelas ahora mismo con un poco de agua para pasarlas.
Rodrigo: De acuerdo (se va).

Capitulo IX: "Une embuscade" (Parte 2)

sábado, 16 de febrero de 2008

Aira un tanto deprimida: ¡Se nos escaparon!
Daniela tratando de animarla: Pero ahora progresamos mucho, si no fuera por ese idiota de Ariè tendríamos a Delia de vuelta y a Telurio.
Grace: ¡Pero no los tenemos!
Melissa: No sabía que esos eran los nombres (cae de rodillas).
Alfredo se acerca alarmado: ¿Estás bien, Meli?
Melissa: Sí, gracias, es sólo el cansancio (lo mira con gran ternura mostrándole una gran sonrisa). Y recuerda no tratarme por el nombre fuera de la academia Alfredo.
Alfredo: ¡OH! Lo siento (se sonroja y dice en un hilo de voz): A… Amor.

Ximena con la voz ya más estable y sin apartar la vista de los que se habían ido: Ya, basta de cursilerías, vamos al vehículo.
Benjamín: Bien, hay que llevar los cadáveres y despertar a Nigera y Louis.
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Mientras tanto, en la oficina de Sue Leng:
Gerald: Emmm… Ya ¿por qué me llamaban?
Sue: ¿Recuerdas a Alasse, la chica del gobierno, que tiene habilidades de veneno?
Interrumpe Luis: Déjame explicar esto a mí. Pasa que ella emana sustancias químicas de tipo venenoso y parece que inspiraste alguna. A ver, dime, Gerald ¿sientes jaqueca? ¿Te duele al respirar? ¿Sientes la cavidad nasal bloqueada?
Gerald: Sí, me duele al respirar… (Lo dijo en un tono bastante alarmado).
Sue: Mira, no te preocupes el veneno que tienes es muy habitual, igual es mortífero pero a los 5 días después de la inhalación, así que Luis trabajará en esto con rapidez.
Luis mira a Sue desconforme y dice: Quizás sea otro tipo de veneno. Ojalá que se trate del que habla Sue... Pero ese veneno te hace vomitar un líquido plomizo ¿haz tenido ese síntoma? Espero que sí… o que pronto lo tengas.
Gerald: De verdad me asustan… (Mira al suelo y luego sube la mirada con mucho carácter). Sí muero, quiero morir luchando… LUCHANDO con la gente que quiero, estos meses de entrenamiento no serán en vano… Pero primero haré varias cosas…
Sue lo interrumpe muy enfadada: ¡No te morirás! Y deja de hablar estupideces.
Luis: Gerald, te quiero en enfermería en media hora… Abriré los protectores de defensas y luego los activadores de veneno para hacer una limpieza. Si el veneno llegó a los pulmones…
Gerald comienza a toser desenfrenadamente, cubre su boca con las manos y al mirarlas ve la sustancia agria de color plomo, mira a Luis y le dice: Tengo el veneno que me dijiste tú… No moriré, ¡tiene cura! (corre de felicidad).
Sue: Lo dejo en tus manos (les sonríe). Iré a ver como llegaron los demás.
Luis: ¿Sabes? A veces he pensado que, por tu habilidad, casi siempre terminas fracturado o eres muy soluble a los venenos o sustancias, como que tus energías no están equilibradas y así las atraes mucho… Creo que si alguien te ve el aura ¡terminaría loco! (Lo dijo de una manera sarcástica).
En el momento que Sue sale de la habitación se encuentra con Débora, quien la detiene un momento diciéndole que tiene que darle información:
Sue: ¿Sí?
Débora: Doctora Leng, es sobre José Casanueva… Él me fue a rescatar a una batalla y me percaté de algo que podría ser el arma secreta de la Academia, si es que la muchacha con la que luchamos no se percató.
Sue: Dime ¿de qué se trata esto?
Débora: La visión X junto a la visión láser, lo deduje después que lo pensé mucho.
Sue: A ver… ¿Tú estás segura? Él no podía desarrollar visión láser por lo que recuerdo.
Débora: Yo lo vi. Él focaliza órganos letales por medio de visión X, sus ojos cambiaron a color naranja… me di cuenta que la mujer se tomaba el pecho y una luz que venia de los ojos de José traspasaba su corazón.
Sue: No le cuentes a Vasti sobre esto.
Débora: Okay…
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Sue: José, necesito hablar contigo, ven.
Ella lo había ido a buscar a la habitación B y ahora caminaban por el pasillo hasta que llegaron a una habitación que aparentemente era de ella.
Sue: Entra… (Se mostraba seria).
José con un tono nervioso: Me pones incómodo, dime qué pasa de una vez.
Sue: Supe que has desarrollado una nueva habilidad, visión láser específica.
José: ¿Ah? No estoy seguro de qué me hablas…
Sue (se veía muy alterada): ¡No te hagas! Sé bien que contra Fortia realizaste esa habilidad, luego caíste inconsciente por el cansancio.
José estaba perdiendo la calma: Pero tú misma me dijiste que eso no lo podría desarrollar…
Sue: Pero al parecer sí puedes, en el Nivel 5°… sólo te queda un paso para llegar a eso.
José: Sería interesante (sonríe algo malicioso) ¡me gustaría entrenar esto!
Sue: Bien, haremos entrenamientos secretos, te avisaré el lugar.
José: ¿Secretos? ¿Acaso Vasti no sabrá esto?
Sue alzó un poco la voz, estaba saliéndose de sus casillas: ¡Si digo que es secreto es porque nadie, NADIE puede saberlo! ¡¿Entendido?!
José alzando también la voz: ¡No sé porqué tanto misterio! ¡Se supone que esto es una organización, deberíamos trabajar en conjunto o nunca ganaremos esto!
Sue fuera de si: ¡YA BASTA! ¡Tú eres un subordinado aquí! ¡Cuándo quiera puedo enviarte a la cárcel sin posibilidades de que escapes! ¡Sé muy bien tus debilidades! ¡Estás advertido! (Se va).
José (para si mismo): Esto está mal… pero guardaré silencio, espero que ciertas personas se den cuenta de lo que ocurre…

Capitulo IX: "Une embuscade" (Parte 1)

viernes, 15 de febrero de 2008

Recibieron las instrucciones para el asalto y quedaron libres. Después de la hora de almuerzo, momento en el que dieron un brebaje especial a los que atacarían para fortalecer sus fuerzas, se marcharon hacia el recinto que atacarían: la Base del Gobierno.
Una vez en el lugar descendieron del vehículo de la Academia y se ordenaron de acuerdo a lo planeado en la mañana. Entonces, Melissa y Alfredo lanzaron cada uno su ataque para producir explosiones en la construcción para así llamar la atención del Gobierno provocando que enviaran a atacarles a los mutantes que estaban bajo su control y así desarrollar la estratagema. Y tal cual ocurrió.
Salieron corriendo del edificio del Gobierno los sujetos: Giselle, Telurio, Ítamis, Alasse, Fortia (la mujer que tenía gran potencia física) y una muchacha que nunca habían visto. Claramente era una batalla desequilibradamente preparada por los de la Academia. Pero los rivales mantuvieron la serenidad, de cierto modo. Sin decir palabras comenzaron a atacar.
Telurio dio una patada al piso y un gran bloque de tierra se levantó frente a los cadáveres, pero fue destruido con las ondas de sonido de Anhellus y un ataque combinado de Electra e Incendio. Entonces Delia arrojó rayos en dirección a las réplicas, pero fueron protegidos por un campo hecho por Noiz.
Paula habló por el comunicador diminuto que se les había dado, de modo que sólo el grupo la escuchara: Vamos, rápido, no soportaré más tiempo con estos cadáveres.
Entonces Wen tomó a Nividia y fue volando fuera del rango de visión de los del Gobierno para atacarlos, por su parte Louis corrió por entre unos árboles para atacar desde ese ángulo.
En tanto, los Gubernamentales estaban atacando: Telurio arrojaba grandes rocas contra los cadáveres, las que eran desviadas mediante las ondas sonoras de Anhellus. Alasse arrojaba ácido por sus manos, pero Noiz creaba campos de protección en torno a los cadáveres para evitar que fueran dañados tan pronto. Ítamis también trataba de inmovilizar a las réplicas, pero se encontraba con la misma barrera. Fortia arrojaba las rocas que Anhellus desviaba mediante su voz, pero Nigera, aparte de manipular los cadáveres, utilizaba energías para crear defensas y ataques con su humo negro. Giselle atacaba con sus relámpagos, pero eran interceptados por las llamas arrojadas por Incendio. Melissa estaba atenta a cualquier ataque que traspasara la defensa que se hacía y Daniela estaba encargada de ocultarlos mediante ilusión óptica. La chica que antes no habían visto se mantenía en la parte de atrás observando todo lo que ocurría.
[NA: Desde aquí se utilizarán las cursivas para los diálogos mediante intercomunicador.]

Nividia: Creo que podríamos humedecer el suelo para que mediante alguna descarga eléctrica hagamos más fácil esto de aturdirlos.

Priss: Me parece excelente, pero ¿de dónde sacaremos agua para eso?

Nividia: Puedo producir una capa de hielo en el suelo, pero habría que derretirla, el agua sólida se notaría más que líquida.

Louis: Yo puedo redirigir cierta parte del fuego arrojado por Incendio hacia el hielo para producir el agua necesaria.

Nigera: Bien, lo que sea, pero rápido, no resistiré mucho más…

Entonces Nividia, con la ayuda de Wen, produjo una capa de hielos sobre gran parte del suelo y Louis, desviando fuego de los ataque hechos por Alfredo hacia el suelo, provocaba que aquella capa se derritiera quedando un gran charco de agua. Justo en ese momento Nigera cae inconsciente por la gran cantidad de concentración y energía que requería la necromanipulación en conjunto con la necroquinesia (sus ataques de humo negro). Y junto a eso la ilusión de Priss se deshace, por la desconcentración producida, ahora sólo les quedaba pelear. Pero Electra reaccionó a tiempo y arrojó un rayo hacia el suelo, produciendo que con el agua como conductor el ataque llegara a todos los del gobierno, dejando a la mitad inconscientes. Se salvaron del ataque: Delia, por su también poder eléctrico; Fortia, debido a su gran resistencia física; y la nueva chica, Sozore, al estar observando todo se percató de lo que se planeaba y arrojó un avión de papel hacia Louis, el cual explotó cuando estaba junto a él y lo arrojó directo contra un árbol, dejándolo malherido e inconsciente, ella además estaba levitando en una especie de tabla.
Delia aprovechó la energía eléctrica del suelo para lanzar un rayo de gran potencia, Electra intentó chocarlo con uno suyo, pero no fue suficiente y sólo gracias a un movimiento ilusorio de Priss logró no recibir el impacto. Fortia corrió a través del agua hacia Ximena para golpearla, y ella con sus ondas de voz logró detenerlo, pero al parecer ya no daba más. Electra y Delia continuaban arrojando sus truenos la una a la otra sin obtener muchos avances, pero al parecer Electra se estaba cansando más rápido. La muchacha desconocida había dibujado una extraña arma en un trozo de papel, la cuál ella con sólo tomarle la hizo real y estaba arrojando bolas de energía contra las bolas de fuego que Incendio lanzaba. Priss se había encargado de llevarse a Nigera y a Louis hacia un lugar apartado y ahora se acercaba para unirse a la lucha. Por su parte, Wen y Nividia arrojaban potentes ráfagas frías y, aunque los choques de energías impedían poder congelar cosa alguna, estaban logrando entumir un poco a los rivales. Noiz se había deformado las manos y corría hacia Fortia, llegado allá le propinó heridas de corte en las piernas y un brazo; pero no alcanzó a dañarle el otro pues recibió justo un golpe por parte de ella y fue arrojado lejos. Volvió Priss y extendió sus manos en dirección a los del Gobierno, quienes perdieron las ansias de luchar y recibieron los ataques arrojados por los muchachos, quedando todos inconscientes, entonces Wen y Tamcus, que se había ahora acercado, se disponían a llevarse a Delia y Telurio cuando apareció Ariè, el sujeto de negro que aparecía siempre en helicóptero, alejó a todos con un golpe de viento y con telequinesis se llevó a los de su grupo dentro del edificio del gobierno, lo cerró y un campo de energía se vio aparecer en torno para protegerlo.
Ximena con un hilo de voz casi imperceptible: ¿A-…Ariè?

Capitulo VIII: "Des faits" (Parte 2)

lunes, 4 de febrero de 2008

De pronto, ya más noche, Víctor es despertado por Paula, muy sorprendido él reacciona.
En un hilo de voz Paula le dice: Te necesito para una misión, ya tenemos el permiso de Sue.
Víctor: ¡¿Qué?! Tú estas loca… Déjame dormir (se recuesta en la cama nuevamente, de pronto la sombra negra de Paula comienza a levantarlo y lo deja caer en el piso).
Víctor muy enojado responde: ¡Está bien!
Paula le sonríe muy animada mientras ella piensa en Rodrigo y él aparece atrás de la puerta de la habitación A:
Rodrigo: ¿Estamos listos?
Paula: Sí.
Víctor: ¿Dónde vamos? (aún su cara demostraba mucho sueño).
Paula: Al cementerio a reclutar cadáveres.
Víctor muy asustado exclama: ¡¿QUÉ?! Tú estas bromeando.
Paula sonríe y dice: Crearemos señuelos, yo manejaré los cadáveres como marionetas y tú te encargarás de que aquellos cuerpos sean muy similares a nosotros.
Víctor: Ya entiendo…
Rodrigo: Yo manejaré el auto de Sue y los esperaré fuera del cementerio.
Víctor: Lo que sí, a media noche necesito visitar todos los cuartos para moldear su cuerpo a semejanza. Además, no tengo energía suficiente para crear tantos señuelos, necesitaremos a Gerald para que extraiga energía de los chicos de la academia y así se las pase a las replicas.
Paula: Rodrigo, tú te bajas, tienes que cargar los cuerpos.
Rodrigo no muy animado responde: Bueno, bueno…
Víctor: Con 8 cuerpos estamos bien, 4 hombres y 4 mujeres.
Paula: Así es.
Al llegar al cementerio no tuvieron problema alguno, profanaron las tumbas como si nada, luego las cargaban de piedras y las sellaban. Rodrigo llevaba el cuerpo de un hombre al hombro, una mujer en un saco y a otra mediante telequinesis, Víctor llevaba el cadáver de una mujer bastante delgada en una maleta y también llevaba el cuerpo de un varón sobre ella, Paula por otro lado tenía levitando a los 3 cuerpos restantes por hilos de humo negro. Así llegaron al auto, subieron los cuerpos en el maletero y los asientos traseros para llevarlos durante el trayecto. Se fueron directo hacía el laboratorio de la academia. Al llegar, Paula fue inmediatamente a con Gerald, lo despertó y le explicó la situación. Él cedió al plan mientras Víctor moldeaba los cadáveres a semejanza de los integrantes de la academia para que queden lo mas similares posibles. Gerald extrae energía de José, Ximena, Alfredo, Rodrigo, Daniela, Nicolás, Aira y Paula y uno a uno las pasaba a los cuerpos sin vida que iban adaptando un aspecto de muñecos sin expresión.
La mañana estaba nublada, Paula estuvo toda la noche pensando en cómo podría usar las réplicas, los demás descansaban hasta que escucharon a Sue decir por los parlantes: “¡Buen día! A todos los espero en la sala de conferencias. Hoy TODOS van a luchar”. Y así todos llegaron a la sala. Estaban expectantes por saber cuál sería el plan de ataque.
Paula: ¿Sue, les explicas tú o les explico yo?
Sue: Dale, comienza tú (la mira con complicidad).
Paula: Como ya saben en la noche estuvimos creando unas réplicas a su semejanza, las cuales son de José, Ximena, Alfredo, Rodrigo, Daniela, Nicolás, Aira y yo.
Ximena interrumpe: ¡Momento! No me gustó eso de profanar tumbas ¿tan bajo tenemos que caer? Los cuerpos muertos tienen que estar en aquel lugar, ustedes hacen algo que va contra las leyes de la vida.
Víctor: Ximena, no es momento para hablar de religión o lo que sea si no te…
Interrumpe Paula: ¡Sí no te gustó la idea, pues cava tu tumba y entiérrate!
Sue: ¡Paula! Ya hemos hablado del autocontrol… ¡CONTRÓLATE!
Ximena: Hubiese preferido mil veces irme en ese momento con Giselle, ustedes son tan hirientes… No los entiendo, esto me saca de quicio (sus ojos se llenaban de lágrimas). Yo… me voy.
Aira corre hacía el pasillo y mira a Ximena muy confiada y le dice: ¡Ximena! Si estás acá es por algo… ¡Te necesitamos! No te puedes marchar así como así, en estos momentos tan críticos, eres importante en esta academia, grupo… o lo que sea.
Gerald: Te necesitamos. De verdad.
Paula: Perdón.
Todos dirigen su mirada hacía ella, mirándola con desconcierto.
Paula muy alterada responde a todas esas miradas: ¡¿QUÉ, no me puedo equivocar a caso?!
Ximena: Está bien. (Sonríe) Manos a la obra, hay que luchar.
Rodrigo: Sí.
Paula: Procedo a explicar... las réplicas serán señuelos manejadas por un hilo de humo negro provocado por mi habilidad, yo iré atrás de las replicas envuelta en humo negro y ustedes detrás mío cubiertos también con él.
Sue: Muy buena idea.
Débora: Creo que José puede hacer invisible a algunos tomándolos.
José: Voy con Grace y Débora.
Vasti: No, tú te quedarás, queremos hacerte algunos exámenes y pruebas. En tanto a Débora, ella se irá a enfermería, los daños que recibió en la última pelea fueron demasiado fuertes.
José: ¡OH! Bueno… (Muestra decepción en el rostro).
Grace: Yo quiero ir en el aire y llevar a Melissa para que haga ataques eléctricos aéreos.
Sue: Creo que sería mejor que tú, Grace fueras en la segunda línea de ataque, en tanto a Melissa, ella debe ir en la primera.
Daniela: Veamos, Víctor y yo tenemos similares habilidades, digo yo para proteger u ocultar. Creo que haríamos un buen equipo en la parte defensiva, junto con Gerald.
Gerald: Está bien ¿qué dices Sue?
Vasti: No, por lo que Luis me dijo, tienes que quedarte para cierto asunto que te explicaremos en privado.
Sue: Bien. Ahora sigamos con las zonas ofensivas.
Alfredo: Me adhiero en ellas.
Sue: Creo que estarías bien en la línea de ataque número uno.
Aira: También yo (Sonríe).
Vasti: No, tú estarías mejor en la segunda.
Rodrigo: Sue… ¿Me uno a esa fila…?
Sue: ¿Por lo de telequinesis dices tú?
Rodrigo: Sí.
Sue: Claro, estarás ahí con Grace y Aira.
Víctor: Yo haré mi carpa protectora, pero también quiero luchar en ofensiva si se empeoran las cosas.
Rodrigo: ¿Y yo?
Sue: Tú leerás el pensamiento de los atacantes y le pasarás información a los de nuestro equipo, les dirás cómo se tienen que mover y todo eso.
Rodrigo: Ya entiendo.
Sue: Bien, el equipo quedó dividido así: Delante irá Paula manipulando a los 8 cadáveres, detrás de ella irá la primera línea de ataque conformada por Ximena, Melissa y Alfredo, luego estará la línea de defensa y para ocultar con Víctor y Daniela, finalmente irá la segunda línea de ataque compuesta por Rodrigo, Grace y Aira. Daniela, deberás estar atenta ante cualquier eventualidad. Benjamín, a ti te quiero vigilando de cerca ante cualquier cosa que ocurra ¿está bien? (el aludido asintió con la cabeza). Ahora vamos…

Capitulo VIII: "Des faits" (Parte 1)

domingo, 3 de febrero de 2008

Noiz: Ya no aguanto más...
Vasti en tono de desesperación: ¡No! ¡Resiste un poco más!
Noiz: No, no resisto…
Alasse: Es lo que esperaba…
Se deshace el campo de protección y él cae dormido al igual que el resto del escuadrón…
Alasse estaba por irse para avisar a sus superiores del logro obtenido cuando Lyan la toma por la espalda y le absorbe la energía, pero antes de lograrlo por completo ella libera sus somníferos.
Alasse: ¡Maldito…!
Lyan: ¡Ja!... ¿creías que hacías bien tu trabajo? Te equivocas (los dos caen de un golpe).
Entonces en ese momento llegan Daniela y Benjamín a la sala dónde estaban todos, pero al mismo tiempo, por una puerta oculta en la pared derecha, entran Telurio e Ítamis.
Ítamis antes de cualquier cosa apunta en dirección a Priss, pero no sucede nada, al parecer ella había utilizado su habilidad de una manera impresionantemente rápida para crear una ilusión y distraerle y así poder cambiar su ubicación a una que le favoreciera. Por otro lado, Telurio alzó una gran masa debajo de Tamcus (Benjamín), pero él con su elasticidad logró evitar el daño. Entonces estiró uno de sus brazos y agrando el tamaño de su puño para golpear a Telurio, pero una pared de tierra se posicionó delante y no pudo dañarle.
Priss le tocó la espalda a Ítamis y ella cayó muy cansada al suelo, sin fuerzas para hacer cosa alguna, entonces le dio un suave golpe en la nuca que la dejó caer inconsciente. Por su parte, Tamcus extendió su otro brazo sin que Telurio se percatara y le proporcionó un golpe de tal intensidad que cayó también al suelo.
Benjamín: Señorita, debemos despertar a nuestra gente y llevarlos fuera de inmediato.
Daniela: Lo sé, vamos.
Daniela apuntaba con sus manos a los del escuadrón y éstos iban despertando muy rápidamente, en tanto Benjamín se acercaba y los movía hasta que despertasen. Se quedaron mirando a Gerald un momento, pues él tenía a Alasse en contacto suyo. Daniela apunto con sus manos para evitar que despertasen y Grace, ya consciente, lo sacó volando, así no despertó la muchacha y Gerald quedó a salvo con Grace. Se despertó muy calmado y exhausto.
Salieron entonces del lugar con cuidado, pero muy rápido, pues Daniela creaba ilusiones a las personas que se encontraban en el camino.
Daniela (al micrófono): Vasti, nos vamos.
Vasti: Bien, avancen a la ubicación del equipo de apoyo.

Fueron entonces a los arbustos donde estaban Nicolás, Rodrigo, Paula, José y Débora. Estos dos últimos inconscientes. Nicolás tomó unos metales que había cerca y modificó el vehículo para que todos pudieran ser transportados en él. Entonces todos subieron con la ayuda de Rodrigo, Paula y Benjamín. Una vez que todos estuvieron acomodados se dirigieron a la Academia.
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En el automóvil, Aira, que era la más conciente, le preguntó a Daniela cómo es que habían podido salir con tal facilidad.
Daniela: ¡Cierto!, ustedes no me habían visto usando mis habilidades.
Aira: Pues, no que yo recuerde.
Daniela con aires de tristeza: Pero igual me gustaría que todos me escucharan.
Aira: Yo les contaré, te lo prometo (le sonríe).
Daniela cambiando su ánimo: ¡YA! Lo que pasa es que yo puedo crear ilusiones a la gran mayoría de las personas, pero hay ciertos tipos psíquicos a los que no puedo.
Aira: Interesante, pero ¿cómo nos despertabas? ¿Cómo es que la mujer esa cayó dormida sin que Gerald pudiera atacarla?
Daniela: También lo que puedo hacer es cambiar el ánimo de las personas, es algo útil cuando se debe trabajar con gente herida… (Sonríe). Mi otra habilidad, que no tuve para que usar, es que mis huesos se pueden doblar, soy muy flexible (ríe). Por cierto, esa “mujer” como le dices, la hemos denominado Ítamis y al chico de las rocas Telurio.
Aira: Bien, se lo diré también a los chicos. Ahora descansaré un poco (se duerme).
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Una vez en la academia, enviaron a Débora de inmediato a la enfermería para que Luis la revisara. Lo mismo con Melissa y Gerald, pero con menor urgencia. A Ximena, Víctor, Grace y Aira los enviaron a descansar. En tanto a José le dieron un líquido revitalizante y lo enviaron a la Sala de Conferencias, junto a Rodrigo, Daniela, Benjamín, Nicolás y Paula; allá los esperaban Vasti y Sue junto con Alfredo.
Sue: Chicos, ustedes en este momento son los qué se encuentran con más energía por eso serán el grupo 2 de batalla.
Vasti: No tanto así Sue, recuerda que todos somos un mismo grupo…
Sue: Está bien. La misión no salió como esperábamos, pero ya podemos saber que el Gobierno tiene en su poder a Giselle.
José: Yo no me encuentro bien, ni menos quiero luchar hoy ¿me puedo retirar de la sala? (Lo dice de una manera bastante agotada).
Sue: Bueno, ve a tu cuarto y descansa…
Paula: Creo que mañana deberíamos ir a atacar (lo dijo de una manera que denotaba una estrategia en su mente).
Nicolás: ¿Por qué lo dices?
Paula: Podremos analizar más la situación, ten en cuenta que los del Gobierno no saben algunas habilidades de los integrantes de nuestra academia.
Interrumpe Sue: ¡Espera! Creo que mañana podremos formar bien el escuadrón.
Daniela: Mañana quiero ir sí o sí (Su voz se notó algo desafiante).
Nicolás: Paula, creo que es el momento que uses las habilidades que hemos desarrollado.
Paula: Sí. Sue, tengo una idea para mañana…
Sue: ¿Sí?
Paula: Esto es una misión para mí y Víctor, déjalo en nuestras manos.
Sue: Confiare en ti, Paula…
Rodrigo: Paula, te quiero acompañar. Ya sé lo que piensas.
Paula: Ya.
La reunión había terminado y los chicos habían ido a sus alcobas a dormir.
En la habitación A estaban conversando sobre la vida de José. Él les contó a Grace, Ximena y Rodrigo que comenzó a robar por necesidad, pues ya no le quedaba a quien recurrir para socorrerse. Luego de la charla todos se durmieron. De pronto, ya más noche, Víctor es despertado por Paula, muy sorprendido él reacciona.
En un hilo de voz Paula le dice: Te necesito para una misión, ya tenemos el permiso de Sue.
Víctor: ¡¿Qué?! Tú estas loca… Déjame dormir (se recuesta en la cama nuevamente, de pronto la sombra negra de Paula comienza a levantarlo y lo deja caer en el piso).
Víctor muy enojado responde: ¡Está bien!

Capitulo VII: "Une invasion" (Parte 2)

jueves, 31 de enero de 2008

[NA: Las conversaciones por intercomunicador aparecerán en cursivas]
Dentro del edificio iba avanzando cautelosamente Ximena, Melissa, Víctor, Gerald, Aira, y Grace. Anhellus usaba una onda aguda antes de avanzar por cada pasillo para aturdir a los guardias o cualquier persona que ahí estuviera, luego Nividia se adelantaba a congelar a dichos sujetos para evitar que dieran problemas más adelante, pero sin matarlos. Yendo de corredor en corredor, para evitar ser muy vistos. Llegaron a una sala muy amplia y vacía. Avanzaron cautelosamente hacia el centro, mirando en todas direcciones para evitar alguna trampa en caso que existiese. De pronto se abre una compuerta en el piso y caen.
Wen extiende sus alas y alcanza a sostener a Electra, Nividia crea una resistente base de hielo en la que todos caen. Entonces Wen comienza a subirlos de a uno.
Gerald: Eso estuvo cerca, debemos tener cuidado.
Vasti: ¿Qué fue eso? ¿Por qué los escuché gritar?
Víctor: No es nada, una pequeña trampa que ya superamos.
Vasti: Deben tener más cuidado en la próxima ocasión… ahora, sigan en lo suyo…
Aira: Profesora, debemos llegar rápido a la estancia o nos quedaremos sin energías.
Vasti: Bien, avancen por la pared para evitar trampas y sigan por el pasillo enfrente, el radar muestra que luego de doblar a la derecha en la primera bifurcación que encuentren estarán en el lugar señalado.

Electra: Bien, vamos allá.
Avanzaron acorde a las instrucciones recibidas y se encontraron con Giselle atada a una silla, en medio de la habitación, vendada y con sólo una luz sobre ella.
Electra se acercó a ella para ver el estado en que se encontraba, pero cuando estaba lo suficientemente cerca Giselle se levantó de la silla y Melissa salió disparada como por una descarga eléctrica. En efecto, en las manos de Delia había aún chispas azuladas.
Wen se acerca a Electra: ¡¿Estás bien?!
Electra: Sí, descuida, que yo también se esos trucos…
Entonces Melissa extiende una de sus manos y le arroja un rayo a Delia, quién lo rechaza utilizando uno de los suyos, en tanto con la otra mano cierra la puerta a través de telequinesis.
Víctor: Lo sabía, ella es muy poderosa.
Wen: ¡Cuidado! (Mueve sus alas y Gerald se mueve de su lugar justo para evitar un rayo azulado de Giselle). Tenemos que estar atentos.
Gerald: Tienes razón…
Giselle se quitó la venda y comenzó a atacar en serio a los muchachos. Electra trataba de atacar con sus relámpagos, pero todos eran interceptados por los de Delia antes de que pudieran hacerle cualquier daño. Noiz creó un campo de protección en torno suyo, de Nividia y de Lyan. De estos últimos, la primera arrojaba trozos de hielo contra Giselle, pero ella los desviaba con telequinesis; el segundo controlaba la energía de los rayos para convertirlas en esferas y enviarlas de vuelta a Delia en esta forma, pero se encontraban con nuevos rayos en su camino. Wen por su parte trataba de desviar algunos rayos y púas de hielo en dirección a Giselle, pero la mujer lograba defenderse muy bien.
Vasti: ¿Necesitan refuerzos?
Víctor: ¡Por favor!
Anhellus estuvo un tiempo dentro del campo de Noiz y de pronto se adelantó unos pasos y envió una onda sonora que desvió todos los rayos hacia el fondo de la habitación. Esto les dio tiempo a los del escuadrón para inmovilizar a Delia, al menos por un momento. Nividia con ayuda del viento de Wen comenzó a congelar a Giselle, primero por las manos para evitar que atacase, luego los pies y el cuerpo. Lyan en eso se acercaba para poder tranquilizarla mediante su ya conocido método, Noiz había desecho el campo protector y había creado uno en torno a Gerald para evitar que sea dañado por el ataque combinado de Aira y Grace. Anhellus estaba atenta a si Delia se despertaba y Electra estaba dispuesta a atacar en cualquier momento, o a defender.
Giselle ya estaba casi completamente congelada cuando un gran impacto eléctrico rompe los hielos y un movimiento telequinésico los arroja a todos contra la pared contraria. Noiz crea un campo justo a tiempo para evitar unos rayos, Delia ahora con su telequinesis había sacado unos trozos metálicos de la pared y los había arrojado contra el grupo. Anhellus utilizó una de sus ondas para devolverlos, pero Giselle los pulverizó con un muy potente relámpago; aprovechando el humo que se produjo Nividia deslizó a Gerald por el suelo y este le quitó gran cantidad de energía a Delia, pero con la que ella conservaba lo envió directo contra una pared y lo dejó inconsciente. En eso un rayo de Electra le dio directo y ella también cayó.
Escucharon la puerta detrás de ellos y vieron a la misma muchacha de la Universidad, Alasse. Al igual que la primera vez, todos cayeron dormidos; todos excepto Noiz que alcanzó a hacer un campo de protección.
Noiz: Vasti, Vasti ¿los refuerzos?
Vasti: Van en camino ¿qué ocurre?
Alasse sonriendo misteriosamente: ¿Con quién hablas?
Noiz: ¡QUÉ TE IMPORTA!... Vasti, apareció la niña del foro de la Universidad…
Vasti: ¿Por qué no escucho a los demás?
Alasse algo encolerizada: ¡Claro que me importa! ¡Imbécil!
Noiz: ¡CALLATE! ¡VETE!... los demás, están dormidos, yo alcancé a protegerme, pero no a los demás…
Vasti: Tranquilo, deben estar por llegar, Sue les lleva…
Alasse encolerizada más: ¡No me eches de mi propia residencia!
Noiz: Ya no aguanto más...
Vasti en tono de desesperación: ¡No! ¡Resiste un poco más!
Noiz: No, no resisto…
Alasse: Es lo que esperaba…
Se deshace el campo de protección y él cae dormido al igual que el resto del escuadrón…

Capitulo VII: "Une invasion" (Parte 1)

miércoles, 30 de enero de 2008

Vasti: Creo haberles dicho que no haríamos movimientos por el momento (les dijo a quienes pretendían rescatar a Giselle como si lo supiera todo). No los sancionaré, porque sé lo preocupado que están, pero para la próxima no tendré consideraciones. Ahora, a la Sala de Conferencias.
[NA: Las conversaciones por intercomunicador aparecerán en cursivas]
Se les dieron las indicaciones respectivas para esta situación, no irán todos, pues era peligroso arriesgar a todo el escuadrón, además, necesitaban tener refuerzo en caso que se presentare algo.
Enviaron a Ximena, Melissa, Víctor, Gerald, Aira, Débora y a Grace. Rodrigo, Paula, José y Nicolás se quedarían en las cercanías en caso de que fuera menester ayudar.
Por medio de indicaciones que Vasti daba por radio-comunicación a unos aparatos especiales ubicados en los oídos de cada uno llegaron al lugar. El objeto también servía para mantener informada a la Academia por medio de un micrófono diminuto.
Habían atravesado el difícil sendero que estaba oculto entre las áreas verdes de la Laguna Grande para llegar a la base oculta del Gobierno.
Iba Melissa corriendo delante, cuando de pronto aparece una mujer de apariencia fuerte y la golpea, arrojándola por los aires unos cuantos metros.
Wen: ¡¿Estás bien?!
Electra: Descuida, mi poder logró protegerme un poco.
Mujer: Vaya, eso fue intenso (se sacude). Pero un simple cosquilleo eléctrico no me hará mucho daño.
Catalis: Déjenmelo a mi… (Se transforma en un elefante y arroja a la mujer con un trompazo). Qué bueno que aprendí a hacer esto… (Vuelve a su forma natural).
El resto entra y continúan luchando.
Vasti: ¿Qué sucede?
Ximena: Nada, nada, un pequeño inconveniente, pero está todo arreglado.
Vasti: De acuerdo, prosigan.
Mujer: Serás pan comido, ¿te transformas?
Catalis: No llenes de palabras tu boca (le sonríe).
La mujer de cabellera larga tenia un aspecto muy agresivo. Se acerca a Débora e intenta golpearla pero ella la evade con sus reflejos, luego Débora se transforma en gato y se sube al cuello de ella, pero la mujer la toma y logra tirarla al piso, la sacudió y la golpeo en el estomago lesionando una de sus costillas, aún así Débora se levanto y arañó el rostro de la otra mujer dejándola cegada por un momento. Débora se transforma en una pantera de color blanco. La mujer se encontraba desesperada, intenta buscarla, pero no la encontró.
Catalis: ¿Me estás buscando?
Mujer: Me las vas a pagar (la mujer reacciona por instintos y logra patear a Débora dejándola en el piso, ella adapta su forma humana y queda un poco aturdida. La mujer se acerca y la toma del cabello y le dice) Tú, muchachita, vas a confesar (cada vez le tironeaba el pelo mas fuerte…).
Catalis: ¡Ni en tus sueños! (Débora gritaba mucho de dolor, parecía que la mujer le había arrancado una parte del cabello. Mientras la torturaba ella piensa en Rodrigo).
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Mientras los chicos se encontraban en la guardia Rodrigo recibía un mensaje telepáticamente, se trataba de Débora.
Rodrigo: ¡Entraré a las instalaciones! Débora esta en peligro…
José: Será más fácil para mí, Rodrigo. Yo iré.
Rodrigo: ¡¿Por qué?!
José: Me puedo hacer invisible y con mi visión X será fácil atacarlo/a a larga distancia.
Paula: Déjalo que vaya.
Rodrigo: Tienes razón.
Nicolás: Quiero dar un aviso, la formación de guardia será triangular. ¡Suerte José!
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El ambiente en aquel lugar estaba denso. Al parecer el Gobierno se había percatado de la entrada de los de la academia al lugar. De pronto el día comenzó a oscurecerse y una lluvia repentina sacudía aquella zona.
Mujer: Qué frió hace… pero tú deberías estar calentita con el dolor de tu cabeza… (Se ríe sarcásticamente).
Débora se percata que alguien se aproxima por su gran sentido auditivo, lo único que deseaba era que fuera Rodrigo y que le diera una buena tunda a esa mujer.
Invisio (pensando): ¡OH!… ¡Ahí está! Esa mujer le hace daño a Catalis, tendré que actuar pronto antes que termine sacándole toda la cabellera de un golpe… Voy a visualizarla.
Catalis: ¡Por favor, me haces daño!
Mujer: Te lo mereces (tira más fuerte)… qué raro, tengo un calor fuerte en mi pecho.
José Miguel visualiza su corazón mediante la visión X, la mujer se mueve y comienza a gritar, sale sangre de su boca y cae en el suelo como si tuviera un infarto. José cae tendido en el piso ya que ocupaba todas sus habilidades a la vez. Débora al verlo así se acerca a él y se transforma en una loba de gran tamaño, de color blanco, y lo carga en su espalda.
Llegan donde Nicolás y este los lleva a la camioneta a que descansen y que Daniela les hiciera algunas curaciones básicas.
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Dentro del edificio iba avanzando cautelosamente Ximena, Melissa, Víctor, Gerald, Aira, y Grace. Anhellus usaba una onda aguda antes de avanzar por cada pasillo para aturdir a los guardias o cualquier persona que ahí estuviera, luego Nividia se adelantaba a congelar a dichos sujetos para evitar que dieran problemas más adelante, pero sin matarlos. Yendo de corredor en corredor, para evitar ser muy vistos. Llegaron a una sala muy amplia y vacía. Avanzaron cautelosamente hacia el centro, mirando en todas direcciones para evitar alguna trampa en caso que existiese. De pronto se abre una compuerta en el piso y caen.